24 de agosto de 2017

H. INTERACTIVA - EL NUEVO AMANECER

"ya ni en la muerte perpetua el olvido"

Hace unos días tuvimos que dejar la casa, solo nos quedaba comida suficiente como para llevarla en un par de mochilas, mi herida gracias al descanso esta prácticamente curada, es increíble la suerte que he tenido.
Llevamos varios días andando por senderos rurales y sí, acampando al aire libre. Aunque cueste de creer por aquí no hay absolutamente nada, con suerte algún animal, de infectados ni rastro, aún así montamos guardias nocturnas y intentamos avanzar en silencio durante el día.
Lo cierto, es que ya estamos exhaustos, demasiados días caminando y evitando las ciudades, poca comida y siempre estar alerta, te destroza los nervios. Me parece inevitable tener que volver a las ciudades, aunque lo intente evitar cada día se hace más necesario.
Irene por su parte comparte mis mismos pensamientos, no quiere ir a la ciudad pero necesita ir, tenemos que buscar comida de una o otra forma.
Ahora nos encontramos cerca de un pueblo, incurriremos al anochecer, esperemos que las sombras nos oculten de aquellos ojos que lo ven todo.

No hay comentarios:

Publicar un comentario